MI NIÑO TRISTE
Mi niño
tiene un cuarto grande, muchos juguetes,
ropa de marca y alimento en demasía,
pero su carita está triste
¿Qué tiene mi niño?
Su madre trabaja y lo deja con la empleada,
papá siempre está en la oficina muy atareado.
Dos o tres palabras cruzan en la mañana,
¡Es más importante las citas del trabajo,
el celular que suena a cada rato!
Mi niño no se llena con juguetes,
ni que le compren cosas a cada rato;
lo que mi niño quiere es un poco de tiempo,
manos de cariño, abrazos de ternura,
padres que sacrifiquen sus egos y sus negocios,
tan solo por un rato.
Que le pregunten: ¿cómo estás, cómo se sientes, que te molesta o
qué te alegra?
Mi niño cae en depresión
y nadie se da cuenta,
no por ser pequeño los problemas no le afectan,
tiene también sus crisis y problemas en el colegio,
a veces hay niños que lo molestan,
a veces siente que nadie lo quiero o acepta.
Pero él se siente solo en medio de comodidades y un buen colegio.
Él solo pide un poco de afecto.
Mi niño ya creció,
ya es todo un adulto,
pero un adulto huraño y desconfiado;
un adulto que no ama las plantas, ni los animales, ni a sus
semejantes.
Pero él no tiene la culpa;
ocupados en sus cosas,
sus padres no le enseñaron eso.
Autora: Edith Elvira Colqui Rojas-Perú-Derechos Reservados