Hola, soy rosa Edith, niña,
muestro la piel juguetona
con esta pluma guasona
para quitar la morriña.
Y te ocasiono piquiña,
si no sonríes un poco
como si fueras un loco,
feliz salí de la ducha
con mi naranja capucha,
y con la pared me choco.
Terminé con chichón duro
y rotos algunos dientes,
asustando a muchas gentes
por ser reina del apuro.
Luego choqué con un muro,
con el vecino amargado
y sus bolsas del mercado,
y me armó tremendo lío
que sentí un escalofrío;
dejó mi rostro arqueado.
Autora Edith ElviraColqui Rojas-Perù- ©