Voy deshojando mis rosas,
pétalo a pétalo por ti.
Piel a piel,
sentimiento a sentimiento.
Mis vestidos van acariciando tus manzanos,
mis lluvias retozando en tus trigales,
regodeándose en tu tálamo feliz.
Mi amante caballero,
cobíjame en tus brazos del frío invierno,
no me niegues los rayos de tu calor.
Mis rosas
serán para ti,
mariposas que se deleitan en tus fuentes;
aladas bailarinas que perfumen tus tapias con su vuelo.
Mis pétalos,
besan suavemente tus cristales
se hacen ovillo de amor en ti.
Amado,
yo deshojo mis pétalos, uno a uno por ti,
me dono como ofrenda votiva,
como pequeña niña
necesitada de ti.
No, esta rosa ya no vive,
si tu cielo
no llueve en mí.
Autora: Edith Elvira Colqui Rojas-Perú-derechos reservados