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lunes, 23 de septiembre de 2019

EUTANASIA



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EUTANASIA
Provocar la muerte deliberada
a quién no puede decidir sobre sí mismo.
Dicen que hay que aplicarle una inyección letal para que deje de sufrir.
El sufrimiento es connatural al hombre.
La enfermedad de cualquier tipo trae sufrimiento,
pero ello no se soluciona atentando contra la vida de un ser indefenso.


Le sentencian a muerte al pobre enfermo,
¿Son dioses acaso para decidir sobre el destino de un ser humano?
¿Tanto les cuesta atender a un enfermo?
¿Les duele pagar sus medicinas, les duele el bolsillo pagar su cama, alimentos, dar un sol por él?

Si tanto les aburre,
si tanto quieren que se muera,
¡No lo maten!
Denle los santos óleos y Dios se encarga de él.
La muerte con eutanasia,
es un crimen nefasto.
Nos descansa en paz el que le aplican porque la muerte no es tan rápida
y si el no lo pidió,
porque ya no puede expresarse y lo decidieron los familiares,
¡Qué feo se debe sentir que lo matan sus propios familiares sin consultarle!

La Eutanasia tiene como sinónimos
eliminación, suicidio, autoeliminación.

Seamos seres humanos valientes,
asumamos el sufrimiento y si no podemos al buen Dios acudamos
con los óleos santos.
Lo digo yo que tuve madre con cáncer letal
y la atendí cinco años, sola sin que nadie me ayude.
y cuando me pidió descansar
le levé los óleos y murió feliz en paz en su lecho.

No seamos inhumanos,
los hombres nos son como un caballos
que por ya no poder salvarlo le ponen inyecciones letales.

¡No a la cultura de la muerte con el aborto y la eutanasia!
Sí al cultura de la vida
y a la dignidad del ser humano.
Uno tiene derecho a morir con el amor de sus seres queridos
no olvidado y muerto a manos de los que amamos.

Generalmente el enfermo terminal está fuera de sí los últimos días
y pide la muerte.
Alentemos su último paso por esta vida
leyéndole la biblia.
Y sí ya son fuertes los dolores,
llamemos a los sacerdotes
que con los óleos amenguan sus dolores
e intercederán por su descanso eterno.

Dios bendiga a los médicos y enfermeras valientes que los rechazan
y no se hacen cómplices de estos asesinatos.
Dios bendiga a las almas que defienden la vida humana
desde su concepción
hasta su muerte natural.

Sí se aprueba legalmente es muy riesgoso
hay personas que están en estado vegetal años y luego reaccionan.
Y otras pueden aprovechar esto para deshacerse de sus seres queridos.
Reflexionemos.


Autora: Edith Elvira Colqui Rojas-Perú-Derechos Reservados






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