CIVILIZACIÓN OCULTA
En selva misteriosa nebulosa,
se halla el secreto de alguna
civilización perdida,
sus jeroglíficos, templos y
arquitectura,
dan fe de gentes de inteligencia
portentosa.
Lo rodean helechos gigantes
vigorosos
una vía larga nos lleva al
templo principal.
Allí se venera al rey superior,
catalogado como descendiente del
mismo Dios.
Es una civilización oculta, perdida
en el profundo bosque.
Sus habitantes son salvajes con
caras pintadas y portan lanzas y escudos como defensa.
La mujer se dedica a las labores
del hogar, los niños recogen frutos y los hombres al trabajo en la tierra y
también son defensores del reino en servicio militar continuo.
El rey es un personaje que lleva
plumas en su falda imperial, corona de oro, alhajas de todo tipo.
Fornido, de tez canela, con rostro
adusto y voz grave y algunos adornos que refuerzan su divinidad
y su señorío.
Los brujos hechiceros le
sirven de protección, también los sacerdotes de su templo personal.
Aquí el poder es dictatorial.
Las masa solo obedecen las
indicaciones del gran rey.
Hay comida en abundancia, carne de
venados, búfalos, conejos salvajes. Hay frutas diversas: peras, uvas,
manzanas que satisfacen sus necesidades pero que también a menudo se
ofrecen como ofrenda.
Se dedican a la caza de animales,
las prácticas guerreras y a rendir culto y pleitesía al gran rey, todos los
fines de semana en ritos sagrados de sacrificios de animales.
Son una raza secreta que vive feliz
en su sencillez y lejanía de la modernidad.
Autora: Edith Elvira Colqui
Rojas.-Perú-Derechos reservados
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