Ya es tarde.
El tren del olvido espera ya.
Sus ruedas añejas girando están.
Nuestros recuerdos de amor,
pronto se disolverán.
Ese amor.
Que en rieles largas, nos supimos dar.
Ese amor que en un solo corazón nos hizo vibrar.
Ese amor que en un solo corazón nos hizo vibrar.
Va diluyéndose, en tramos de olvido.
Va alejándose poco... a poco
En viaje sin retorno.
Ya es tarde amor, ya es tarde.
Ya se oye, el silbido del tren.
Y en sus humos plomos.
Nuestros amores, fenecerán.
Ya es tarde amor mío,
para súplicas, lamentos y llantos.
para súplicas, lamentos y llantos.
Aquí ya no quedan lazos de reconciliación.
Tú irás por tu camino
y yo en ese tren, me marcho, hoy.
Ya es tarde, cariño mío,
ya es tarde,
El tren del olvido, avanza ya…
En sus ruedas nos deja,
sólo el polvo,
de un vieja ilusión.
Ya es tarde vida mía,
no insistas por favor.
Nuestro amor quedará sólo y desgastado como este viejo tren.
Un suspiro y una lágrima anuncian
Que el tren, partiendo está.
Levantaré la mano, en un adiós sin final.
En ese tren se van.
Nuestros últimos sueños.
Nuestras exquisitas horas de amor.
Amor mío, lo nuestro, no funcionó.
El amor se va expirando,
con el avance de este tren.
En otras ciudades, en otras estaciones
al fin, te olvidaré.
Adiós, cariño,
buena suerte, mi amor.
* Autora: Edith Elvira Colqui Rojas – Perú (Derechos
reservados).
No hay comentarios:
Publicar un comentario