QUISIERA VOLVER A MI NIÑEZ

QUISIERA VOLVER A MI NIÑEZ

Quisiera volver a mi niñez,

y que aflora otra vez mi niño interior.

Ser esa niña juguetona

que en el parque de mi casa jugaba con mis amigos y hermanos

a la chapada o San Miguel.

Esa niña, que todo lo veía con ojos de miel.

Quisiera disfrutar de mis juegos con las muñecas de trapo,

Corretear como loca por toda la casa

para que mis hermanos no me encuentren

Jugando a la gallinita ciega.

Quisiera oír, otra vez, la voz tierna de mi madre:

“Hijos, ya pasen a comer”

¡Ay, cómo quisiera volver a ser niña!

Y disfrutar con las canciones de Yola Polastri y los Parchís.

Jugar la ronda del lobo,

Saltar con el salta soga,

Ver el mundo lleno de flor.

Cómo quisiera

Que mi niño interior nunca muriera,

que se conserve su inocencia, su ternura,

y su tez angelical.

Pero sé que los años pasan

Y que esos tiempos ya no volverán.

Pero mi niño interior, por donde vaya,

sé que siempre aleteará.

Autora: Edith Elvira Colqui Rojas-Perú-Derechos reservados

París bajo la lluvia

París hoy está bajo la lluvia,

¡Permanece tan callado y mágico!

Romántico, ¡tan romántico!...

Salgo a la calle con mi paraguas rojo,

la acera se llena de agua de lluvia;

moja mi ventana.

Salpica la lluvia fresca,

moja también mis tacones y mi vestido,

le da besos a mi alma nostálgica,

¡Me siento, tan a gusto aquí!

A pesar de la nostalgia

y de la añoranza.

¡Qué dulces saben tus besos

bajo el paraguas

y la lluvia fresca!

Y París mirándonos con sus ojos mágicos.


¡Te vez tan hermoso, París, bajo la lluvia!



Las hojas secas caen de los árboles,

se dejan llevar por la lluvia;

como yo me dejo llevar por tu hermosura,

¡Querida, ciudad luz!

Me embelesas,

con tus calles mojadas,

tus edificios elegantes;

tus hermosos  jardines de otoño amarillento…

Todo es más hermoso, hoy,

cuando llueve

en París.

Todo es, más luminoso

y brillante...

Autora Edith Elvira Colqui Rojas-Perú-Derechos reservados

DÉJAME

Déjame ver amado,
tus ojos, tu sonrisa, sólo una vez más.
Déjame disfrutar de tus fragancias
que me hacen volar.
Déjame acariciar tus cabellos y
sentir la misma ternura
que sentí ayer.
Déjame
tomar tus manos
y sentir tu calor, una vez más.

¡Déjame!, 
déjame amado,
mirarte a los ojos, sólo un vez más.
Sólo una vez.

Déjame verte igual como te dejé,
estático
inerte
eternizado.

Y cuando haya pasado todo esto,
déjame luego,
marcharme tranquila,
el tren del olvido,
me espera ya.


Autora: Edith Elvira Colqui Rojas-Perú-Derechos reservados

DEPORTADOS

Tienen derechos

y viven en sobresalto
ingresan a sus casas
quieren que firmen papeles
no los dejan vivir en paz.

¿Por qué hay crisis en Centroamérica?
¿Quién es responsable de las drogas?
Por qué tanto crimen
y violencia.

Son seres humanos, los deportados
huyendo de un destino negro
buscan un sueño
¡Cuidado con los maras!

Un país generoso que los acoja
que los deje trabajar.
Hay mucho abuso
lo veo en televisión y noticias,
felizmente tienen la tarjeta
que hace respetar,
su derecho al silencio
y a no firmar.

Deportados,
algún día,
no los habrá,
porque en su patria encontrarán paz,
trabajo y libertad.

Autora: Edith Elvira Colqui Rojas-Perú-Derechos reservados

MURIÓ EL AMOR

 

¡Murió el amor, el amor se murió!

Murió cantando su canción:

Quise reunir a todos como hermanos
pero don egoísmo me lo impidió.
Quise evitar las guerras,
pero el afán de dominio pudo más.

Quise regalar una rosa de solidaridad,
pero alguien por allí le echó sal
¿No entienden los hombres
que sin amor, se hacen el mal?

Este amor esta guarnecido,
en las playas de la vida esta varado,
abandonado
y herido.
La indiferencia,
la deshumanización lo mató.

El amor murió
ayer por la tarde
no pudo soportar tanto hambre,
tantas guerras, tanta indiferencia
y murió,
En un cajón negro
lo llevan a enterrar.
Q.E.P.D el amor.

Quizás en los ojos de la esperanza,
Quizás cuando se piense más personas que en monedas.
En solidaridad,
y en mundo más justo
y más humano.
Pueda en alas, resucitar.

Autora: Edith Elvira Colqui Rojas-Perú-Derechos reservados

Tu cabeza es un árbol (poema surrealista)

¿Por qué sembraste plantas en tu cabeza?
¿Por qué quieres ser árbol?
Piensa mejor en ordenar tu cuarto.

Con tanta agua en la cabeza,
te puede dar fiebre.
Tu cabeza es un árbol,
crece cada día, cada día,
como cabellera,
¡Péinate con alambres tu cabello!

Regaré tu cabeza con agua,
lo abonaré,
para que siga creciendo, 
hasta el cielo,
hasta el cielo,
y me traiga la voz de los ángeles,
cuando tu cabeza llegue allá arriba.


En la pared me pintaron como grafiti,
mis ramas pegadas a la pared,
y unos hombres tomaron licor al frente mío,
me dejaron oliendo mal.

Te vez bien, con tu cabeza de árbol,
creo que ya no me molesta,
parece peinado de fiesta,
ensortijado África Look.

Te enamoraste de una chica cabeza de árbol
¡Es tan sensual!
Sus cabellos son bellas enredaderas.


Te casarás, mi cabeza de árbol
tendré que esperar los nietos
cabecitas de árbol.

Autora: Edith Colqui Rojas-Perú- Derechos reservados.

¡Qué alegría!

¡Qué alegría abrir los ojos
hoy a la vida!
Qué alegría, respirar su aliento
y me sonría con cara de niña.

Qué alegría
que se filtre por mi ventana
la luz de la vida,
ver sus chispas de colores,
ver sus maravillas.

Milagro es la vida,
milagro
tus huesos y
mis huesos.
¿Quién por más que se afane
Puede agregar un codo a la medida de sus días?...

¡Qué alegría,
tomar a vaso lleno,
los sorbos líquidos
que me regala la vida!
¡Sonreírle con optimismo!
Porque mi alma todavía
a nuevos sueños
puede arribar...

Qué alegría
que tú estés a mi lado todavía,
hijo,
amigo,
hermano,
compañero...

Qué alegría
estar en paz
hoy con la vida,

¡Qué alegría!

Autora: Edith Elvira Colqui Rojas-Perú-Derechos reservados