miércoles, 19 de marzo de 2025
lunes, 17 de marzo de 2025
Mi pluma en primavera
Mi pluma en primavera
Es primavera,
mi pluma se embriaga en el aire
con aromas de flores y vientos,
se mezcla en el canto del mirlo
y danza en los valles del verso.
El amor abre sus alas,
despierta en las hojas su voz,
y en cada latido de mi poemario
resuena un mañana mejor.
La primavera en mis letras
susurra destellos de luz,
infunde su aliento en los hombres
y enciende la fe en su azul.
La diosa de pétalos vivos,
ha llamado a mi puerta de armiño
yo le he abierto el alma
y juntas, en dulce canción,
tejimos versos consoladores,
coronas de lirios y paz.
Besamos la frente de niños sin cuna,
prendimos velas por los caídos,
sembramos estrellas entre las guerras,
y al fuego de un sueño encendido
alzamos la bandera de la fraternidad universal.
Edith Elvira Colqui Rojas-Perú (prohibido copiar ideas, metáforas, frases del texto bajo sanción legal)
martes, 11 de marzo de 2025
La casa sola
La casa sola
La casa está sola,
duerme con el silencio
de la paloma dormida.
Luce callada,
hablando
soledades de metal.
Luce callada,
hablando
soledades de metal.
Crujen sus puertas
con un agrio suspiro,
sus bisagras oxidadas
se quejan de la brisa y sus sal.
sus bisagras oxidadas
se quejan de la brisa y sus sal.
En sus sillones descansa
un hijo que nunca llegó.
En sus comedores,
tenedores de alegría saltan,
(pobres, ignoran el dolor del mundo terernal).
un hijo que nunca llegó.
En sus comedores,
tenedores de alegría saltan,
(pobres, ignoran el dolor del mundo terernal).
Sus relojes
la hora cero están marcando,
sus minuteros despilfarran tiempos muertos.
la hora cero están marcando,
sus minuteros despilfarran tiempos muertos.
En sus cuadros habla
una sed de amor que nadie sacia,
una luz tìmida emiten sus imágenes severas
y estoicas.
una sed de amor que nadie sacia,
una luz tìmida emiten sus imágenes severas
y estoicas.
La casa se quedó sola,
pensó que siempre iba a ser habitada,
y ahora llama a los vientos, a los niños, a los vecinos
para sentirse acompañada.
pensó que siempre iba a ser habitada,
y ahora llama a los vientos, a los niños, a los vecinos
para sentirse acompañada.
Sus baúles están llenos de recuerdos amoratados
y de primaveras añejas.
En su tez
el colorete se ha vencido,
sus pómulos se cayeron
en el tobogán de la vida.
y de primaveras añejas.
En su tez
el colorete se ha vencido,
sus pómulos se cayeron
en el tobogán de la vida.
Hubo un tiempo en que reían los espejos,
las paredes guardaban secretos juveniles
y la mesa servía
las paredes guardaban secretos juveniles
y la mesa servía
banquetes de historias infantiles.
Sus ladrillos caen, se desmoronan,
sus cortinas se desgarran,
pero su alma azul
permanece encendida,
pero su alma azul
permanece encendida,
como una vela.
Autora: Edith Elvira Colqui Rojas-Perú
(prohibido copiar frases, metáforas del poema,bajo sanción legal)
lunes, 10 de marzo de 2025
sábado, 8 de marzo de 2025
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