EN EL ALFÉIZAR DE MI VENTANA

EN EL ALFÉIZAR DE MI VENTANA

En el alféizar de mi ventana

veo caer las gotas de lluvia

como bailarinas desencajadas,

lánguidas mojadas.

Afuera hay tormenta

y en mi corazón la nostalgia me sobrecoge,

los fantasmas de tu recuerdo regresan

y alientan mi pena batiente.

Araño el vidrio de las añoranzas

que me mojan en oscura soledad.

No estás  mi gorrioncillo,

y la lluvia y su pena

se quieren en mí mimetizar.

Me siento como esta lluvia

siguiendo su ritmo monótono

que no se cansa de llorar y llorar.

Autora: Edith Elvira Colqui Rojas-Perú-Derechos Reservados 

SOL PRIMAVERAL

SOL PRIMAVERAL

Sol primaveral

llegas con tu canto angelical

besando a las flores con tus rayos de bondad.

Sol primaveral,

tu mirada ilumina el cielo

en rayos de fraternidad.

Tus vestidos amarillos

alegran el mundo,

las flores al verte abren sus pétalos ilusionados.

Las abejas zumban en jolgorio,

las mariposas danzan en baile ilusorio.

El campo en todas sus gamas florece,

¡Cuánta felicidad en tus encajes dorados ofreces!

Autora: Edith Elvira Colqui Rojas-Perú-Derechos Reservados

AMOR DECANTADO

RETO LITERARIO 

Tema: EL VIVO AMOR CAUTIVO.

Frase: EN UN TIEMPO LLENO DE CURIOSIDAD.

AMOR DECANTADO

Amor decantado me entregas en tus recintos floreados.

Somos un amor que surgió temprano,

en un tiempo lleno de curiosidad.

Nos conocimos de casualidad,

fuimos amigos  y muy pronto  sedientos amantes.

Somos un amor cautivo pero vivo en sus paisajes coloridos.

Nos amamos cada tarde en rojo vivo arrebol.

Nos amamos como  descosidos y fuera de control

Nos bebemos hasta las ansias

¡Como caballos desbocados!

Nosotros vivimos nuestro  romance a fuego llameante.

Cautivos como palomas enjauladas

en un tálamo que nadie conoce.

Nos mecemos en juegos apasionados.

En nuestro lecho

las jaulas se rompen.

El amor cautivo sale volando en nuestras pieles calientes.

Autora: Edith Elvira Colqui Rojas-Perú-Derechos Reservados

Prohibida su copia total o parcial de la obra)/ copyright ©

HOMBRE (Acróstico)

HOMBRE (Acróstico)

Hombre es aquél que ama y respeta a la mujer.
Ondeando en su pecho la sensibilidad y el vigor.
Mástil de entrega generosa.
Brazos de trabajo laborioso.
Rey que gobierna amando.
Estela de bien y marfil que guía el hogar.

Autora: Edith Elvira Colqui Rojas-Perú-Derechos Reservados

MUERO DE GANAS DE TI

MUERO DE GANAS DE TI

Muero de ganas de ti

de tocar con mis pétalos 

tus labios tibios,

de rozar con mis pieles

tus atractivos mantos.

De beber de tu cáliz

los sabrosos jugos del amor.

Muero de ganas de tocarte,

de verte, de disfrutar tus varoniles aromas.

Ansiosas mis corolas te llaman,

sedientas mis rosas te esperan.

Solo tú calmas su sed eterna,

de sentirse amadas, en tu fuente inagotable.

Autora: Edith Elvira Colqui Rojas-Perú-Derechos 

Para mis poemas

LA SOMBRA

LA SOMBRA

La sombra se adelanta al hombre,

la sombra del pasado dejó huella y camina sola.

Él mira doblado como su sombra se le adelanta.

Sembró en el ayer,

y ahora descansa.

Su sombra camina delante de él, ¡Como espectro!

Le hace el trazo perfecto paras sus huellas.

Ya tiene alma esta sombra, ¡Tiene vida!

Y adelanta sus pisadas.

Él queda detrás.

La sombra que sembró en el pasado,

le hará todo el trabajo.

Autora: Edith Elvira Colqui Rojas-Perú-Derechos Reservados

CUANDO EL SOL ACUESTA SU PENA

 

Cuando el sol acuesta su pena

Cuando el sol acuesta su pena

allá en los lejanos ocasos,

sin mas música que el ladrido de los perros hambrientos.

Sin violines de paz en sus tejados.

La vida se torna monótona,

porque los hombres ya no aman.

Las chicharras de la compasión se apagan.

Se oye solo el rostro del miedo, el terror al fracaso.

Y una soledad profunda que se quiere comer a todos,

a todos los que se resisten salir de su ostracismo ciego.

Vivir es dialogar, compartir.

El hombre en su concha de egoísmo

va camino al cadalso.

El sol brilla,

en los que saben regalar una sonrisa

aunque el alma sangre de pena

El sol jamás se acuesta

en el ser que con su mirada ilumina.

En el que  con su voz cansada aún canta salmodias de alegría.

No necesitamos ser adinerados

para irradiar paz y bellas melodías.

El sol del alma

en el alto monte siempre brilla,

si hacemos del otro, nuestro espejo cada día.

Autora: Edith Elvira Colqui Rojas-Perú-Derechos Reservados