SABOR ANAVIDAD
Ya se saborean las amorosas manzanas navideñas,
la chimenea generosa se enciende,
el árbol de luces despierta,
la casa se viste de luz y ternura.
Las coronas navideñas
cantan villancicos de dulzura.
Se percibe el aroma del pavo
y del chocolate humeante.
Feliz sonríe el niño Dios
en la humildad del pesebre;
su corazón se hace cáliz inmenso de amor.
Exultan los hombres,
festejando el cumpleaños
del niño Dios.
La magia navideña está en todos lados,
y, en medio de jolgorio y festejo,
del loquerío de lascompras
y de los rezos de misa de gallo,
¡Ocurre un gran milagro!
Los hombres se miran, al fin,
como hermanos.
Edith Elvira Colqui Rojas-Perú