Anoche cuando dormí
muchos arácnidos vi
son negros y escabrosos invaden por doquier la ciudad
una señora grita !Que barbaridad¡
son los negros de la era fantasmal
quieren saciar su hambre
litros de sangre por doquier
caminan clandestinos por los techos
pican las puertas
entran
extienden sus telarañas y atrapan a los hombres sin cesar
los absorben como moscas
y quedan secos y ya no pueden hablar
solo el aliento jadeante exhalar.