EN LA SILLA DEL DOLOR
En la silla del dolor
se ha sentado doña nostalgia;
y confundida y silenciosa
se mece parsimoniosamente
en el vaivén de sus penas.
Un cuerpo llagado en sufrimiento,
es un alma
que no halla la salida,
sumergida en el polvo y el fango
clama por un auxilio desahuciado.
Es la silla del dolor de los desposeídos,
de los enfermos terminales,
de los recluidos en un hospital psiquiátrico.
Para su dolor no hay paliativos inventados
y almuerzan en la silla diaria del dolor y el llanto
o en el paroxismo ciego extremo.
Ensimismados en la espiral del hastío.
Espera la luz de la redención,
ya llega quien te consuela.
Autora: Edith Elvira Colqui Rojas-Perú-Derechos Reservados