Me casé con una sorda,
para que no escuche mis secretos de varón,
y no sienta cuando en la noche me voy con amigos de parranda.
Me casé con una ciega
para que no vea cuando desordeno su cocina cuando tengo hambre,
ni vea mis travesuras que hago en la sala,
ni pueda ver cuando mire a otra mujer mas agraciada.
Me casé con una muda
para que no hable tanto
y a todo sin chistar me diga:Sí, sí,sí.
Creo tener la mujer perfecta,
solo tengo un problema,
tengo una mujer sorda, muda y ciega
que en la cama no me reconoce: ja,ja,ja,ja.
Autora: Edith Elvira Colqui Rojas-Perú-Derechos Reservados