se ha posado primorosa en la
flor de alhelí,
¡Cuánta belleza encarna en su
piel de tisú
y las piezas, de su delicado
Tutú!
Sus antenas me han sentido,
y yo las he acariciado,
ella dócil, mansa, se ha
dejado querer.
Una mariposa amarilla
en mi jardín está volando,
derrocha sol de simpatía
y garbo de gitana.
En las tardes de verano,
me visitan mariposas
amarillas a tropel,
me cercan danzarinas,
me hacen muecas gráciles;
se posan en mis cabellos, en
mi blusa, en mis brazos...
Yo las quiero como mis
hermanas o mis hijas pequeñas,
¡Vengan mariposas amarillas
con su ama!
Fugan luego a las rosas, a
los geranios y las campanillas, buscando el polen ansiado;
¡Yo las contemplo extasiada!
Cuando las mariposas amarillas
llegan a mi jardín,
alegran mi alma dormida;
sus presencias divinas
trasmiten esperanzas renovadas.
Autora: Edith Elvira Colqui
Rojas-Perú-Derechos Reservados
No hay comentarios:
Publicar un comentario