Llueve en mis manos, ansias de quererte,
acariciar el universo de tu piel en mis dedos,
tocar tus sedosos cabellos resbalando mimos en ellos.
Me llueven ansias de estampar en tu boca,
las gotas mojadas de mis besos,
que sientas el calor de mis caricias,
como lluvia fresca.
¡Que te rieguen,
que te empapen,
que te bañen hasta hacerte delirar!
Me llueven ansias de ser tuya,
de que tú seas solo mío,
que nuestras melodías de amor
nos envuelvan en sus infinitas notas,
nos trepe el sentimiento cual yedras encendidas
y volemos juntos en los vientos libres del amor.
Me llueven ansias,
de hacerte un pedestal en mi cuerpo,
de hacerme tu camino de pasión,
de ser encaje níveo de tus ansias.
de hacerte un pedestal en mi cuerpo,
de hacerme tu camino de pasión,
de ser encaje níveo de tus ansias.
de ser,
tu estrella exclusiva y luminosa
tu estrella exclusiva y luminosa
brillando solo para ti.
¡Ay, vida mía!
Cuando te veo,
me llueven ansias de amarte,
de quererte y estrecharte,
pues en mi alma solo inspiras,
rosas de sentimientos hermosos.
Cuando te veo,
me llueven ansias de amarte,
de quererte y estrecharte,
pues en mi alma solo inspiras,
rosas de sentimientos hermosos.
Eres tú,
un néctar delicioso,
un paraíso fácil de amar.
un paraíso fácil de amar.
*Autora: Edith Elvira Colqui
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