Moisés y Pipo
Cuando Moisés se levanta en pijama, Pipo detrás le sigue.
Si Moisés duerme en su cuna, Pipo se recuesta también en el sofá.
Hay química entre ambos.
Si hasta parece que son hermanos en lo dulce y tiernos que son.
Moisés y Pipo, dos almas entretejidas en ternura infinita.
Cuando temprano, llamo a Moisés para tomar desayuno,
Pipo pide son sus patitas que pronto lo atienda,
quiere comer a la hora que come Moisés.
Es muy apegado a él;
y Moisés sin su gato no vive.
En el jardín ayer, ha dibujado a su gato con crayones,
la profesora le ha puesto una buena nota y su cara feliz en la frente,
y al llegar a casa, nos ha enseñado a todos su dibujo.
A cargado a Pipo en su falda y le ha puesto el dibujo en la cara.
"Mira Pipo, te he dibujado y has quedado bonito"
Pipo mira a Moisés enternecido como entendiendo el regalo del niño.
¡Qué dulce armonía entre Moisés y Pipo!
Ambos congenian como hermanos.
Vuelan felices, en el mismo cielo infantil alado.
Autora: Edith Elvira Colqui Rojas-Perú-Derechos Reservados
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