© SOY UN PEZ SOÑADOR

SOY UN PEZ SOÑADOR

Busco peces con plumas doradas comprometidas, peces con zapatos de tierra... Este poema lo podéis seguir leyendo en las plataformas que siem...

sábado, 13 de julio de 2019

EL JARDINERO Y EL ANCIANO (relato)

La imagen puede contener: planta, árbol, exterior y naturaleza
EL JARDINERO Y EL ANCIANO

En una finca, un jardinero regaba  su planta de mangos como todos los días, pero esa tarde, al regar cantando su árbol, escuchó unas risas de niños en la entrada de la finca, no veía nada, pero seguía escuchando a unos  niños jugando y riendo. Se asombró de este hecho y se acercó al lugar, pero no veía nada, así que creyó que era su idea y siguió regando, luego más tarde oyó la voz de hombre en una banca que estaba cerca del árbol, se oía como que se quejaba y decía:- ¡Hay mis hijos me abandonaron, mis hijos y de pena he muero y ahora debo vagar por esta finca que fue mi casa pero que estos malos hijos me arrebataron!
El jardinero se asustó mucho, pues se oía  la voz tan nítida, pero él no veía nada, así que aterrado dejó al manguera  con el agua corriendo y fue a contárselo a su esposa, que era la cocinera de la finca, ella fue al lugar y escuchó muy sorprendida esa voz que decía: ¡mis hijos, me han abandonado mis hijos! y lloraba.
Muy asustados ambos, le contaron todo esto a los dueños de la finca los que no les creyeron y a las 5 pm. de la tarde,  hora en que se oía esa voz, fueron a la banca y la escucharon aterrados la voz lastimera del anciano.
 Entonces los hermanos decidieron vender la finca, pues sabían que era la voz del padre, a quien habían dejado morir solo en el hospital hace un año.
 Pero en cada casa que compraban o alquilaban la voz del viejo se oía por las noches:
-¡Ay mis hijos- mis hijos me abandonaron!
Y tanto les perturbaba esa voz a los hermanos, que  tuvieron que ir a un tratamiento psiquiátrico, porque pensaron que se estaban volviendo locos, pues no dejaban de oír esa voz, hasta que un cura les aconsejó le hicieran una misa al alma del difunto  y que en la misa en su interior le pidan perdón y le lleven flores a su padre fallecido y le echen agua bendita su tumba y luego de esto, recién los dejó de atormentar la voz de su anciano padre fallecido  en soledad.

Autora: Edith Elvira Colqui Rojas Perú-Derechos Reservados



No hay comentarios:

Publicar un comentario