Desde los
zarcillos de mi desván
suelto plumillas de versos para ti...
A ti te escribo, amor,
a ti que haces estallar mis versos en sol,
a ti, mi Odiseo valiente,
a ti, mi Bécquer romántico,
a ti ,verbo de mi verbo, sal de mi sal.
A ti, lumínica esencia de mi vida...
Tú eres mi nítida fantasía,
y mi realidad celestial.
Tú, que me cubres de mantos níveos de amor.
Tú, mi fortín y fortaleza,
mi París ansiado,
mi cielo humano.
Te miro y deslizo poco a poco los jugos de mi pluma
en el papel
y las gotas caen libremente y ligeras,
porque te conocen
porque te aman
y hacen complicidad contigo,
amado mío.
Escribirte no es nada difícil
porque mi pluma y el amor, anidan confabulados en ti.
Te escribo,
y mi universo se llena de luz,
vuelan mariposas de ilusiones en mi desván,
¡Veo chispas de magia por todas partes!
Te escribo,
recordando todos los cielos de predilección
que tejes, día a día para mí.
Te escribo en silencio, para sentirte más mío,
más cerca de mí.
Te escribo y sin objetividad.
No se puede ser objetivo cuando se ama.
Yo te veo perfecto,
alado,
casi angelical...
Obnubilada, extasiada, arrobada.
Así, así te escribo hoy, amor.
Autora: Edith Elvira Colqui Rojas-Perú-Derechos reservados
suelto plumillas de versos para ti...
A ti te escribo, amor,
a ti que haces estallar mis versos en sol,
a ti, mi Odiseo valiente,
a ti, mi Bécquer romántico,
a ti ,verbo de mi verbo, sal de mi sal.
A ti, lumínica esencia de mi vida...
Tú eres mi nítida fantasía,
y mi realidad celestial.
Tú, que me cubres de mantos níveos de amor.
Tú, mi fortín y fortaleza,
mi París ansiado,
mi cielo humano.
Te miro y deslizo poco a poco los jugos de mi pluma
en el papel
y las gotas caen libremente y ligeras,
porque te conocen
porque te aman
y hacen complicidad contigo,
amado mío.
Escribirte no es nada difícil
porque mi pluma y el amor, anidan confabulados en ti.
Te escribo,
y mi universo se llena de luz,
vuelan mariposas de ilusiones en mi desván,
¡Veo chispas de magia por todas partes!
Te escribo,
recordando todos los cielos de predilección
que tejes, día a día para mí.
Te escribo en silencio, para sentirte más mío,
más cerca de mí.
Te escribo y sin objetividad.
No se puede ser objetivo cuando se ama.
Yo te veo perfecto,
alado,
casi angelical...
Obnubilada, extasiada, arrobada.
Así, así te escribo hoy, amor.
Autora: Edith Elvira Colqui Rojas-Perú-Derechos reservados
No hay comentarios:
Publicar un comentario