Hombre
desaliñado, macilento,
vagas y duermes por las calles.
¿Qué fondos de la vida
te llevaron aquí?
¿Suena tu barriga hoy?
¡Tienes frío!,
¿Tiene hambre, tu dolor?,
¡Tienes hambre de amor!
Hoy te miró la indiferencia,
pero ni una moneda te dio.
Ya te tocan las espinas del alma
pues tu familia se exilió.
Llevas en tus bolsillos rotos
truncados sueños
ilusiones perdidas.
Hoy quiero llenarte el alma
con monedas de amor.
No te gastes las monedas en licor,
aunque quizás lo hagas para darte valor,
para huir del dolor.
Mi hombre
vagabundo,
hoy día no deambuló,
no pidió monedas.
Permanece callado,
se ha enfermado,
se ha envuelto,
en periódicos de muerte.
desaliñado, macilento,
vagas y duermes por las calles.
¿Qué fondos de la vida
te llevaron aquí?
¿Suena tu barriga hoy?
¡Tienes frío!,
¿Tiene hambre, tu dolor?,
¡Tienes hambre de amor!
Hoy te miró la indiferencia,
pero ni una moneda te dio.
Ya te tocan las espinas del alma
pues tu familia se exilió.
Llevas en tus bolsillos rotos
truncados sueños
ilusiones perdidas.
Hoy quiero llenarte el alma
con monedas de amor.
No te gastes las monedas en licor,
aunque quizás lo hagas para darte valor,
para huir del dolor.
Mi hombre
vagabundo,
hoy día no deambuló,
no pidió monedas.
Permanece callado,
se ha enfermado,
se ha envuelto,
en periódicos de muerte.
*Autora: Edith Elvira Colqui Rojas-Perú-derechos reservados
No hay comentarios:
Publicar un comentario